CARNAVALES ERAN LOS DE ANTES.

Carnaval de Apóstoles-La imagen puede tener derechos de autor-

CARNAVALES ERAN LOS DE ANTES.

Los carnavales no se festejan en una fecha uniforme porque en el calendario ocurren tres días antes del miércoles de ceniza.

El origen del carnaval se relaciona con un carácter libertario y lujurioso en las celebraciones de los antiguos griegos y romanos.

En Roma se celebraba las festividades del Dios Saturno, a quién se le rendía pleitesía y ofrendas para llegar al calor de las cosechas y por ende, el momento de bonanza. Los banquetes, juegos y bailes en un todo vale, de esos días de fiesta que propiciaban el desenfreno y los excesos.

En Grecia se festejaba a Dionisio el hijo irreverente de Zeus y dios del vino, surge el dios Momo  a quién en la actualidad se lo sigue relacionando con el carnaval. Para los griegos en estas jornadas se corrían todos los límites de la corrección.

Para la Real Academia Española el carnaval es: “los tres días que preceden al comienzo de la Cuaresma, consiste en mascaradas, comparsas, bailes y otros regocijos bulliciosos”.

La “etimología de la palabra” tanto en el idioma italiano como el griego significa “quitar la carne”.

El carnaval termina cuando empieza la Cuaresma cristiana, el retiro colectivo de cuarenta días, donde la iglesia propone a sus fieles el ejemplo de Cristo en su retiro al desierto con una actitud penitencial.

Esta fiesta surgió como una forma de tomar fuerzas para poder resistir esos cuarenta días. La celebración popular permitía realizar grandes banquetes con consumo de carne y dejarse llevar por otro tipo de excesos de índole sexual que agotara sus ansias y les permitiera resistir al ayuno y la penitencia.

Se dice que el carnaval más antiguo es el de Venecia, donde aparecen la ornamentación y el uso de máscaras. Esto permite dejar de lado las distinciones sociales permitiendo que la nobleza se junte libremente con el pueblo o viceversa.

De aquellos orígenes relacionados con lo religioso y los excesos se pasa a estos días, donde la celebración se desarrolla mayormente en las calles y se mantiene un vínculo con lo pagano y lo festivo.

El carnaval moderno es para nosotros una fiesta popular, donde se fueron modificando algunas costumbres que hacían a la forma de celebrarlo. Hubo un tiempo, donde esos días se festejaban y organizaban en barrios donde los vecinos eran los principales protagonistas. Casi todos se conocían, jugaban con agua de latones, baldes o bombitas, desde las dos de la tarde hasta las seis, las mujeres arrojaban agua a los hombres y éstos a ellas. Durante ese horario nadie podía molestarse porque fue empapado con agua.
El que no quería jugar permanecía en su casa y no salía hasta después de las dieciocho. A veces, el desborde o desubicación, mostraban a una enfermera que no quería jugar, pero debía dirigirse en ese horario al Hospital para cubrir su guardia, llegar empapada a su lugar de trabajo.

Por la noche los corsos de los pueblos, con las comparsas, escuelas de samba, carrozas y las infaltables máscaras sueltas que hacían reír a la concurrencia. Como corolario el baile en el club, donde se encontraban todos dispuestos a divertirse hasta el amanecer.

De a poco se fue modificando ese sentido de pertenencia de la gente con el carnaval. Comenzaron la organización de eventos multitudinarios que convocaban turistas de todas partes para presenciar los desfiles de las comparsas enfocadas en shows diferentes a los tradicionales. La gente dejó de participar activamente en los corsos y en los carnavales, mudando el rol de actor a espectador.

En nuestro país, al tradicional Carnaval de Corrientes, se le agregó el Carnaval de Gualeguaychú, o el Carnaval de Humahuaca, más relacionado con el folclore y las costumbres ancestrales.

Río de Janeiro sigue siendo la Capital del Carnaval del mundo, reciben a 5.000.000 de personas de todos lados, que concurren al sambódromo, para presenciar el despliegue mágico de música de carnaval, escenografía de primer nivel y participación de celebridades en comparsas o scola do samba.

“Por cuatro días locos
Que vamos a vivir
Por cuatro días locos
Te tenes que divertir…”

“Siga el baile, siga el baile
De la tierra en que nací
La comparsa de los negros
Al compás del tamboril…”

Ramón Claudio Chávez.
www.ideasdelnorte.com.ar

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5 respuestas

  1. Se ve en la foto la puerta del antiguo club social. En casa hay fotos de mi madre en los corsos disfrazada de cowboy por la calle sarmiento frente a la antigua heladería de Hubert

  2. Incontables matrimonios que aún hoy perduran, se conocieron en esos carnavales de antaño, participando tanto en las “scolas” de zamba, como en los grupos de bailes.

  3. Creo que ese espíritu de desenfreno y de correr los límites de la prudencia y el recato si bien fue mermando , sigue siendo la esencia del carnaval lindo recuerdos.

  4. Devolver instantes fugaces del melancólico ya ,tiempo de vino y rosas, ese pasado inolvidable, en la pluma del doc.
    Conocí yo a lo que fue mi mujer, en el club de los polacos-criollos, al son de Mazur y sus Halcones.

  5. El Carnaval en Andalgala se esperaba todo un año, ¡¡cuando los años eran muy largos!!.Salian dos Comparsas tradicionales y hacian las Delicias de todas las personas del Pueblo, eso si : Comparsas Norteñas con guitarras, cajas, quenas, flautas, violines, bombos y canciones Vidaleras.Todos jugabamos en carnaval, agua, vino, cerveza, soda, harina, betum, papel picado , huevos etc.Baile con Orquestas tanto de siesta como de noche y es aqui a donde Coincido con mi Amigo Claudio…., pasamos de actores a espectadores y hasta nos cobran entrada.Para Mi ya no es Carnaval.

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