EL AMOR DE PATRICIA.

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EL AMOR DE PATRICIA.

Hace ya algunos años nos contaba un amigo, que debió trasladarse a los dieciocho años desde la chacra a una ciudad del interior de la provincia.

Como tantas personas, Francisco o “Fraño” como era conocido, se fue de la chacra al pueblo en busca de oportunidades laborales. Una pieza de pensión y noches solitarias lo esperaban en su nuevo destino.

Una de esas noches, mientras casi todos los habitantes de la pequeña ciudad observaban la telenovela “Betty la Fea”, el recorría las calles semidesiertas. En una plaza en penumbras una joven también buscaba compañía.

Se acercó con cierta timidez e inició una charla intrascendente. La chica respondió amablemente y dio- paso a la continuidad de la conversación.
Pidió permiso para sentarse a su lado y la calidez de la noche se encargó del resto. Sin imaginarse terminaron abrazados en una pieza de madera llena de austeridad.

Fraño regreso a la medianoche a su refugio y no pudo conciliar el sueño pensando en esa chica que le brindo tanto afecto.
En la mañana siguiente quiso compartir su experiencia con dos compañeros de trabajo de la empresa de transporte donde hacía de todo un poco.

– “¡Anoche conocí a Patricia, una morocha hermosa, en la plaza cerca de la avenida! ¡Estuvimos juntos hasta la medianoche y no veo la hora de encontrarme nuevamente con ella!”- Comentó.

Sus amigos indagaron sobre las características físicas de la chica, luego de las explicaciones de Fraño, sin vacilar le dicen en la cara:
– “¡Esa chica es Ramona, no se llama Patricia como decís, es “la prostituta más conocida del pueblo!”-.

Francisco se quería morir:

– “¡No puede ser!, es tan dulce; yo la llamo Patricia por aquella historieta de la Revista Anteojito!”-

Estaba totalmente enamorado.

El amor romántico es un vínculo desinteresado, con cierta espiritualidad e igualitario y la prostitución una relación meramente carnal, guiada por un interés económico y constituida por asimetrías. Se podría decir que nada tienen que ver entre sí.
Santiago Morcillo, en su tesis “De los amores falsos, el más sincero el de las putas”, habla de la masculinidad, los afectos y las emociones.

Citando a Bernstein (2001- 2007) se dice que la importancia que adquieren las emociones en el comercio sexual, con la expansión de la (girlfriend experience) una modalidad de servicios que puede extenderse como un “lazo de amor temporario”.

Francisco siguió frecuentando a Patricia, ella le contó su historia y él la entendió; pensaba en prolongar el vínculo de su amor, aunque necesitaba la decisión de ella.

Jóvenes los dos, con escasos recursos económicos para proyectar hacia adelante, la vida los encerraba entre el amor y la realidad.
Fraño nos dijo, que en Patricia encontró el amor sincero, ese que nunca había conocido y ella, logró refugio de un compañero que no la miraba como habitualmente ocurría, un mero “objeto sexual”.

Los dos siempre tenían tiempo para ellos.

Ramón Claudio Chávez.
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