Fotografía ilustrativa.-Puede tener derechos de autor.
A PROPÓSITO DE LA AMISTAD.
Con cierta naturalidad se dice que el tiempo fluye rápido, que los días son intensos, que el tiempo es menor. Así de simple se afirma que ha pasado el primer semestre del año y no nos dimos cuenta.
Las “redes sociales” han modificado radicalmente la forma de relacionarnos, ahora somos amigos de personas con las que nunca hemos compartido una reunión.
La falta de afectos no puede superarse con un “me gusta” o “me encanta” en Facebook, o en otras de las plataformas de internet.
En un estudio de investigación de la Universidad de Piura se concluye que “La amistad es un vínculo que se cultiva con el trato asiduo y el interés recíproco a lo largo del tiempo; surge entre personas de distintas edades, estratos sociales, etc”.
Las personas de muchos amigos dicen sentirse más felices, eso es una caricia para el alma, ese sentimiento recíproco hace a muchos logros personales indispensables.
Las redes sociales crean una dependencia emocional y muchas veces falta de empatía para que nuestra vida de relación sea más profunda.
Fue precisamente en “Tik Tok” que en el año 2022 se advertía que personas de “los Millennials” y de la “Generación Z”, han comenzado a terminar amistades desapareciendo sin dejar rastros.
La expresión anglicana “ghosting” (desaparecer como un fantasma), ganó popularidad cuando los empleados de una empresa decidieron irse y abandonar sus puestos de trabajo sin renunciar ni ser despedidos. Estas nuevas generaciones pretenden hacer lo mismo con su círculo de amigos, comentando que están aburridos de que estos no les presten atención y solo aparezcan cuando los necesitan.
No es una relación romántica que termina porque una de las partes se está viendo con otra persona, sino que se desvanece porque ya no le interesa a uno o al otro.
Psicólogos clínicos tienen opiniones diversas sobre la manera de interrumpir amistades. Unos dicen que las decisiones de “Millennials” y “Generación Z” pueden mejorar sus vidas sociales, permitiendo que crezcan relaciones nuevas y más ricas. Otros, por el contrario, recomiendan que ante algún problema con una persona es mejor tratar de arreglar y no alejarse sin decir nada, porque estos le podrían traer problemas en un futuro. La persona que inicia un distanciamiento, puede luego, tener sentimientos de arrepentimiento o remordimiento, lo que puede dejarle una sensación de oportunidad perdida para resolver las cosas.
La llamada “Generación dorada” de los adultos mayores han destacado siempre “que eran felices con muy poco”, jugaban en la calle y charlaban hasta llegar la noche. Ese tiempo sin tiempo los hizo crecer sin complejos.
Las personas mayores se mostraban siempre con sus amigos, no estaban las redes y eran muy difícil sostener afectos a distancia. La ruptura de una amistad era rápidamente advertida por su entorno por lo que no se podía “desaparecer como un fantasma”.
Estas mismas personas recuerdan a sus amigos de la promoción del colegio, a los amigos de la infancia a quienes quizás no frecuenten por el transcurso del tiempo y la vida que cada uno ha llevado adelante, a los amigos de la vida con los que compartían días de la juventud o de épocas más recientes.
Entre un tiempo y el otro la mirada puede ser diferente, los más grandes de edad no querrán que los tilden como “personas de trapo” o sin corazón; los más jóvenes no se detienen a pensar como es la nueva vida de relación donde se puede interactuar con cualquiera.
La amistad es un valor mucho más importante como para abordarla en un análisis superficial, es un camino sin destino creer que lo que estuvo bien antes está mal ahora o viceversa.
El ser humano no puede vivir sin amigos, sería como vivir sin aire. Le búsqueda de la felicidad, el goce, el bienestar, necesita ser compartida con los amigos.
Ramón Claudio Chávez.
www.ideasdelnorte.com.ar
6 respuestas
Un comentario atinado de nuestra realidad. Las amistades virtuales son un engaño que aceptan las partes, pero tienen sabor a nada.
Coincido con el Pro.Lobayan en cuanto a las ” amistades” virtuales. Con respecto a la verdadera amistad, creo que es una respuesta a la necesidad de afectos seguros en los cuales apoyarnos. No se busca, se da espontáneamente y sedimenta con el el tiempo y la asiduidad. Una verdadera bendición. La biblia dice que un amigo fiel es remedio saludable
Hermoso tema. Qué triste sería la vida sin amigos.
Ahora…no se debe confundir a un amigo verdadero con un “compinche”. Son cosas totalmente diferentes.
Por eso no creo en eso de “yo tengo muchos amigos”. Los verdaderos AMIGOS, así con mayúsculas, son pocos. Son los que están para uno de manera incondicional y viceversa. Son quienes conocen todo de nosotros.
Y sin temor a equivocarme, están un escalón más arriba que un hermano de sangre.
Por ende, tener un hermano amigo, es la conjunción perfecta, tal como lo es el amigo hermano.
Amigos, son los del gea, los de la secundaria, los de la primaria, algún allegado… El resto son números en un escenario virtual…
No están, no se abrazan, no comparten, no lloran con uno… No existen.
Que buena nota la hoy.
Justo atinado el relato para estos tiempos. A las “amistades” virtuales yo le sumaria las comerciales, esas que duran lo que dura la transacción, aquella vieja frase de ..”el cliente es un amigo”…
No siempre duran toda la vida, a veces son efímeras, duran lo que dura un trabajo, un viaje, etc. Son reales, aunque duren poco.
Cómo siempre, logras hacerme pensar con tus relatos. Muy bueno!! Abrazo.
Coincido con Griselda,me hizo pensar seriamente tu relato,la amistad es algo tan hermoso y único para cada ser humano.Yo creía que tenía muchos amigos , pero ahora no se si són solo conocidos o compinches como dice Dany. Cómo siempre muy feliz de tener tus escritos cada semana.No nos abandones Amigo.Lupin .